Manuel Amezcua reivindica el carácter de superación de Mencía de Salcedo, la fundadora de la villa de Noalejo
Cuatro décadas de investigación desvelan algunas incógnitas de la vida privada de la criada de la emperatriz Isabel de Portugal cuando se va a cumplir el 450 aniversario de su muerte
Publicado por José Espinosa de los Monteros. Noosfera, 23/09/2023
El pasado 21 de septiembre tuvo lugar en Noalejo, provincia de Jaén, la 51 Jornada de Estudios de Sierra Mágina, en la que participó como ponente Manuel Amezcua, Presidente de la Fundación Index y Cronista Oficial de esta localidad jiennense, que fue donde inició sus primeros años como enfermero comunitario.
Así lo reconoció el ponente en un gesto de reconocimiento de unos años que, según sus palabras, forjaron su doble dimensión como profesional de la salud y como historiador, fruto de los cuales fue el libro de historia local “El Mayorazgo de Noalejo. Historia y etnografía de la comunidad rural” (1992) y una multitud de artículos y conferencias pronunciadas desde entonces sobre la historia y la cultura de este pueblo singular situado estratégicamente entre las provincias de Jaén y Granada.
En este caso, el Dr. Amezcua, que en la actualidad es profesor de Historia de la Medicina en el Departamento de Historia de la Ciencia de la Universidad de Granada, retoma en su ponencia la vida del personaje más importante de la historia de Noalejo, Mencía de Salcedo, su fundadora, que fue camarera de la emperatriz Isabel de Portugal y del príncipe Felipe. Y el motivo es que en el próximo año se conmemora el 450 aniversario de su muerte, siendo una ocasión excepcional para poner en valor a una mujer con tintes legendarios cuya biografía el Dr. Amezcua viene desvelando desde hace cuatro décadas.
“Cuando en 1989 publiqué en Diario Jaén un amplio reportaje biográfico, Mencía de Salcedo era apenas conocida por una leyenda local y las menciones puntuales de eminentes historiadores como Rodríguez Molina y Coronas Tejada. A mí me ha tocado darle carta de naturaleza histórica a partir de la consulta de decenas de archivos dentro y fuera de este país”.
Portada del reportaje publicado en 1989 por M. Amezcua sobre la vida de Mencía de Salcedo
El Cronista de Noalejo adelanta en su ponencia datos biográficos inéditos sobre Mencía de Salcedo, de la que hasta ahora apenas se sabía más allá de su vinculación con la casa real de la emperatriz. En ella y a pesar de desempeñar puestos modestos, como moza de cámara, lavandera y costurera, logró acumular bienes suficientes para comprar una franja de tierra fronteriza que se disputaban los concejos de Granada y Jaén, de la que terminó convirtiéndose en “señora de lo espiritual y temporal”, fundando la actual villa de Noalejo. Los nuevos hallazgos han permitido restablecer sus relaciones familiares, de manera que ya se sabe que sus padres, oriundos de los valles vizcaínos de las Encartaciones, fueron llevados siendo adolescentes a servir a la casa de los Reyes Católicos. Estos los vincularon a las casas de las princesas Isabel y María de Aragón en sus matrimonios con Manuel I de Portugal. Fue en la corte castellana en Portugal donde los padres de Mencía se casaron y tuvieron sus dos hijos. Y con el tiempo regresaría toda la familia a España con la infanta Isabel al tiempo de su boda con el emperador Carlos.
Para el profesor Amezcua, el periplo peninsular de los Salcedo-Santa Cruz ilustra un fenómeno poco estudiado, el nomadismo de los empleados en las casas reales, que se van a mover a la par que sus señores en los vínculos filiales y matrimoniales de reyes, príncipes, infantes e infantas por los confines de la monarquía. Lo más revelador de la ponencia del cronista de Noalejo, tiene que ver con el hábil proceso que utilizó Mencía de Salcedo para pasar de ser sirvienta a dueña de un señorío que, aunque sumamente pequeño, la catapultó a unas esferas sociales que nunca su familia habría imaginado. Para ello, la fundadora de Noalejo no dudó en reclamar a sus familiares de las Encartaciones la propiedad de las tierras y bienes que por herencia le hubieran correspondido a sus padres. Una vez suyos, sus procuradores no encontraron quien los comprasen o arrendasen, pero a ella le valió el título de propiedad para incoar un expediente de hidalguía a su favor, al vincularlos a las sagas nobiliarias del señorío de Vizcaya. Toda una estratagema que, unida a la concentración de propiedades en un territorio como los Entredichos de Noalejo, le valió para erigir su señorío, terminando pareciéndose más a la señora que tuvo que a la criada que fue.
La última parte de su intervención, la dedicó el Dr. Amezcua a exponer algunos interrogantes que aún subsisten sobre la vida privada de Mencía de Salcedo, como su posible nacimiento en Lisboa o indicios de un posible casamiento, aunque finalmente su legado, ante la ausencia de hijos, recayó en sus amigos los Maldonado, sirvientes como ella en la casa real. En cambio, pudo desvelar otros aspectos hasta ahora confusos o desconocidos, como el momento de su llegada a Noalejo, cómo era su casa-palacio y ubicación de otros edificios que ella erigió, o el que falleciera como consecuencia de la enfermedad que padeciera en los últimos años, la perlesía, una forma de parálisis asociada a la edad. “Quién lo iba a decir- resalta el prof. Amezcua– una mujer que vivió en un movimiento continuo con las oscilantes sedes de la casa real, terminaría falleciendo en un estado de parálisis severo”.
El cronista de Noalejo finalizó su ponencia exponiendo su preocupación sobre la imagen de Mencía de Salcedo que se está transmitiendo últimamente en los medios. “La ideologización del personaje, situándola como una feminista adelantada a su tiempo, entre otras falacias -afirma Manuel Amezcua-, no hace más que distorsionar lo que verdaderamente fue Mencía de Salcedo: una mujer excepcional que logró por méritos propios ascender en la escala social, al tiempo que conformaba un pueblo que respondía a sus ideales de independencia y que nunca ha olvidado su memoria”. El profesor Amezcua ha anunciado la próxima publicación de una monografía biográfica sobre Mencía de Salcedo, coincidiendo con el 450 aniversario de su muerte, que es fruto de 40 años de rigurosa investigación sobre la fundadora de Noalejo.
El VI Seminario de Historia de la Enfermería de la Cátedra Index ICS-UCAM da un nuevo paso en la innovación docente desde el abordaje del patrimonio cultural
Murcia, España. El Salón de Actos del Campus de los Jerónimos, en la Universidad Católica de Murcia (UCAM), fue el escenario el 6 de mayo de 2024 del VI Seminario de Historia de la Enfermería, que este año tuvo como lema “Los cuidados de enfermería a través del arte y la arquitectura, una visión histórica”. Este evento, organizado por la Facultad de Enfermería y la Cátedra Internacional INDEX de Investigación en Cuidados de Salud, congregó a medio centenar de estudiantes de enfermería con el objetivo de enriquecer su formación académica y profesional.
La inauguración del Seminario estuvo a cargo de la Dra. Paloma Echevarría Pérez, Decana de la Facultad de Enfermería de la UCAM, y del Dr. Manuel Amezcua, Director de la Cátedra y Presidente de la Fundación Index. Ambos destacaron la importancia de integrar las humanidades en la formación en cuidados de salud para una comprensión más amplia de la disciplina.
El plato fuerte del seminario fue la mesa redonda moderada por la prof.ª María Abellaneda Millán, Docente de Historia y Fundamentos de Enfermería en la UCAM, quien ha coordinado el Seminario junto a la Dra. Isabel Morales, también docente de dicha universidad. Los ponentes, los doctores Lorenzo Tomás Gabarrón y José Manuel Hernández Garre, exploraron cómo el arte y la arquitectura han jugado un papel crucial en el desarrollo de los cuidados de enfermería a lo largo de la historia. El Dr. Gabarrón, Docente e Investigador de la Facultad de Arquitectura de la UCAM, presentó su ponencia “Arte y enfermería. Una historia por contar…”, mientras que el Dr. Hernández Garre, Docente e Investigador en la Facultad de Enfermería, disertó sobre “Anthropoarquitectura. La edificación histórica del espacio clínico y su conexión con las cosmovisiones culturales inmanentes”.
De especial interés resultó el coloquio entre alumnos y profesores, en el que se presentaron tres representaciones visuales elaboradas por estudiantes a partir de obras de arte de especial significación para la historia de la enfermería, destacando la influencia del entorno físico y estético en la práctica clínica y su impacto en la humanización de los cuidados. Este diálogo subrayó la capacidad del arte de capturar la esencia del cuidado y actuar como una herramienta terapéutica, facilitando la recuperación del paciente.
Los aprendizajes derivados del seminario enfatizaron que el arte y la arquitectura no son solo expresiones estéticas, sino elementos fundamentales en la evolución y efectividad de los cuidados de enfermería a lo largo del tiempo, resaltando su rol interconectado en mejorar la experiencia de los pacientes y la práctica clínica. Este seminario ha ofrecido una oportunidad única para que los futuros profesionales de enfermería comprendan la evolución de las prácticas de salud y su entorno, y cómo estas disciplinas pueden continuar influyendo positivamente en el campo de la salud.
Crónica realizada por Laura Hernández Mingorance, 1º A de Enfermería
El haber asistido a este Simposio ha significado para mi una forma diferente de ver la que espero sea mi futura profesión: la Enfermería. El primer día, jueves 10 de noviembre, hicimos una visita guiada por la Granada Hospitalaria, siguiendo los pasos de San Juan de Dios. Me gustó mucho descubrir en primer lugar, el hospital de San Juan de Dios, un edificio sin duda emblemático para nuestra profesión, a pesar de que en estos momentos se encuentre en sus peores años, debido a su mal estado de conservación. Seguimos paseando por el centro de Granada descubriendo muchos de los lugares y edificios que esconden historias relacionadas con la Enfermería y con la vida y obra caritativa de San Juan de Dios en nuestra ciudad, la cual fue y sigue siendo objeto de admiración.
Acabamos nuestro itinerario de visitas en la casa museo de los Pisa, ubicada cerca de la carrera del Darro. Esta casa, convertida en museo en la actualidad, y la familia a la que perteneció (los Pisa), tuvieron una estrecha relación con la vida de San Juan de Dios, ya que en ella es donde pasó sus últimos años de vida, y fue esta adinerada familia la que ayudó enormemente a San Juan de Dios en su labor de caridad con los más necesitados. Allí descubrimos el archivo donde guardan muchos de los documentos que pertenecen a la Orden hospitalaria de San Juan de Dios, entre los que encontramos algunos dedicados a la Enfermería, y que tuvimos el privilegio de ver y leer de voz de nuestra guía. Además, contemplamos gran cantidad de obras, como pinturas, grabados, piezas de orfebrería, marfiles, muebles, porcelanas, etc. Lo que más me llamó la atención fue poder ver la habitación de San Juan de Dios, en la que aún se conserva el trozo de suelo donde se arrodillaba para rezar. Y sin duda lo que más me gustó de la casa, fue el precioso y céntrico patio que tiene a su entrada, adornado con una fuente en el centro y numerosas plantas con flores, árboles, barreños de barro y cerámica, que recuerdan al de una casa árabe.
V SIAHE
En el segundo y tercer día, 11 y 12 de noviembre, el V Simposio Iberoamericano de Historia de la Enfermería (SIAHE) tuvo lugar en el salón del actos del hospital de San Rafael, perteneciente también a la Orden de San Juan de Dios. El viernes, pudimos ver una mesa redonda sobre “El diálogo de la Enfermería en otras disciplinas.” Personalmente me hizo pensar mucho lo que en ésta se trató, lo importante que es la transdisciplinaridad de nuestra profesión con otras disciplinas. El pensar filosófico de la Enfermería, de donde saqué algunas frases que me resultaron muy interesantes:
“Siéntate y piensa tu vida”
“Es importante la amplitud de la mirada de la filosofía enfermera sobre el cuidar y quienes cuidan”
“No pasar nada por alto”
“La renuncia al esfuerzo de seguir siendo sumisos”
“El esfuerzo de la filosofía enfermera para cuidar todo el pensamiento y pensar en todo el cuidado”
También se organizaron una gran cantidad de comunicaciones, las cuales fueron muy interesantes y de temas muy variados así como provenientes tanto desde distintos puntos de nuestro país, como del otro lado del charco, Brasil, México, Chile, Cuba, Colombia, Uruguay y Portugal. Fue una delicia ver como a pesar de todos los kilómetros que nos separan, nuestras preocupaciones son las mismas, nuestros problemas parecidos e iguales en muchos casos, a mi parecer esta mezcla de culturas e ideas enriqueció enormemente el simposio.
De igual forma se proyectaron un gran número de pósteres, a lo largo de los dos días.
Tuvimos el privilegio de ver la presentación del corto “Cómo escribir en el agua” de Andrés Seara, el cual me pareció una manera fabulosa de expresar como influyeron las ATS en que hoy nosotros tengamos la posibilidad de poder ser graduados en Enfermería. Y vimos el trailer de la película «Luz de Soledad», que describe la vida y la obra de esta sierva de María.
También hubo a lo largo de los tres días, una exposición de antiguos trajes de enfermera, que venían desde Brasil, entre los que pudimos ver el de Florence Nightingale.
Como conclusión de haber acudido a este simposio diré, que a pesar de que allí se trataron temas muy específicos, de los que aún no entiendo mucho y que algunas veces me costó entender, fue una actividad de lo más enriquecedora para mí. Me llevé muchas cosas aprendidas, a parte de toda la información que allí se dio, que me serán de gran utilidad para mi paso por la universidad, mi futura profesión de enfermera y la vida en general. Ya sé cómo se presenta una comunicación y un póster, cómo se realiza un debate después de exponer un tema. En definitiva cómo funciona un simposio, lo cual no tenemos la oportunidad de ver todos los días.
Termino animando a todos mis compañeros y todo el que lea esta publicación, a no dejar de ir a este tipo de actos, que sin duda son de gran interés, y en los que no solo se aprende de los temas sobre los que se habla; y dando las gracias por dejarnos participar en él.
GALERIA FOTOGRAFICA DE LA VISITA GUIADA POR LA GRANADA HOSPITALARIA
GALERIA FOTOGRAFICA DEL EVENTO
DEJAD VUESTRAS IMPRESIONES EN LA SECCION DE COMENTARIOS
El Hospital Real fue fundado por los Reyes Católicos en 1504, años después a la toma de Granada, aunque la portada no se concluyó hasta el siglo XVII. Se trata de una obra en la que se mezclan elementos góticos, renacentistas o mudéjares. Se encuentra localizado en la calle Cuesta del Hospicio y actualmente se trata de la sede del Rectorado de la Universidad de Granada y la Biblioteca Universitaria.
Este hospital se caracteriza porque siempre tuvo una mala organización, es decir, nunca funcionó bien, debido a que dependía de varias administraciones (la Iglesia, la ciudad).
En un principio estaba destinado para enfermos de sífilis también conocido como mal francés, pero después fue ocupado por locos. A estos últimos se les conocía también como inocentes, ya que no eran conscientes de lo que hacían. Fue en 1971 cuando pasó a ser parte del patrimonio universitario.
El edificio cuenta con dos plantas. En la planta baja encontramos varios patios:
-Patio de los mármoles
-Patio de la Capilla
-Patio de los inocentes
-Patio del Archivo
En la segunda planta encontramos la Biblioteca Universitaria, en donde hay libros antiquísimos de todas las áreas.
Entre la colección de libros de la Biblioteca Universitaria destaca el famoso Codex Granatensis. Es un documento que se encuentra en la caja fuerte de esta Biblioteca debido al gran valor que tiene. Se trata de un tipo de enciclopedia en la que se incluyen temas como: monstruos de agua, cuadrúpedos, insectos…
En el Codex Granatensis se hace una descripción de ellos y además son representados en dibujos realizados con pinturas naturales y muchos de estos dibujos llevan pan de oro.
En el Codex Granatensis también hay escritas algunas historias, de las cuales algunas no están completamente terminadas.
Dentro de la Biblioteca Universitaria encontramos otra sala en la que se encuentra la colección de libros de Emilio Orozco. En esta sala encontramos también una representación de la celda de San Juan de Dios, quien estuvo interno en este hospital.
La clorosis es una patología que tuvo su mayor apogeo durante los siglos XVI al XIX. Esta patología fue presentada en algunas pinturas como tema principal de las obras de numerosos maestros holandeses. En un principio se consideró como una anemia por deficiencia de hierro y actualmente no se presenta en los textos de medicina, esto no se explica ni por el tratamiento de sales ferrosas, ni porque ahora sea menos común. Por otra parte, hay otro significado que posee la palabra clorosis. Así se llama a la falta de actividad de los cloroplastos de una planta que le provoca un color amarillento.
Historia
La clorosis ya había sido tratada en los escritos hipocráticos. En Asia, en tiempos de Galeno, se llamaba clorosos a los hombres de cara pálida. La primera descripción amplia de la clorosis fue hecha en 1554, por el profesor de Heildelberg, Johannes Lange, de Silesia (1485-1565), bajo el epígrafe De morbo virgineo (morbus virgineus). Ambrosio Paré (1510-1592), la llamó cachexia virginium. La reseña del padecimiento, ya con el nombre de clorosis, fue hecha por Jean Varandal (Varandaeus), de Montpellier (1560-1617), en su libro De morbis et affectibus mulierum, en 1615.
Durante estos años surgen dos teorías diferentes de su causa:
1. Alteraciones en la sangre: se considera que su causa es la anemia que afecta a las mujeres debido a su condición o sexo. La mala higiene, alimentación, falta de hierro son los factores que provocan esta enfermedad.
2. Psicología: se cree que otra causa puede estar relacionada con el mito de la virginidad, con deseos y sentimientos reprimidos.
A principios del S. XX va disminuyendo el interés, y pasa por verse como una «pseudoclorosis», para terminar como la «consecuencia de una enfermedad» (no como enfermedad en sí misma), causada por infecciones (muy probablemente tuberculosis), por alteraciones hormonales (ovarios, tiroides), úlceras gastrointestinales, déficit alimentario, endocarditis… En 1936, F.M. Fowler escribre sobre su desaparición y finalmente, se ha concluido que se trataba de anemia hipocrómica.
Síntomas y signos
Se pensaba que era una enfermedad crónica que afectaba solamente a mujeres de entre 14 y 24 años que eran vírgenes. También podía afectar a cualquier mujer que estuviera embarazada o con la menopausia. Además esta clorosis podía recibir otros muchos nombres como: “mal de amor” o “enfermedad de la virgen”.
Los síntomas observados por los médicos en aquella época fueron:
-Palidez que se prolongaba por todo el cuerpo.
-La piel adquiría una coloración amarillo-verdoso.
-Las extremidades inferiores sufrían tensión y lasitud.
-Se producen hemorragias nasales, palpitaciones, dolores de cabeza, somnolenncia, hinchazón de la cara, edemas en los tobillos.
-Trastornos en el apetito, tanto por exceso(obesidad), por ingerir cosas nocivas (ej:tierra) o por defecto (anorexia).
-Síntomas de tristeza, nerviosismo, hipocondría, ganas de llorar, irascibilidad…
-Reducción de la líbido, lipotimias, amenorrea, sofocaciones…
Tratamiento
Los tratamientos que se llevaban a cabo para curar esta enfermedad eran:
-Sangrías, en algunos casos con sanguijuelas.
-Recomendaciones dietéticas.
-Píldoras de hierro.
-Pediluvios.
-Descargas eléctricas en el útero.
-El matrimonio o el embarazo.
Conclusión
Por una parte, con este tipo de tratamientos las mujeres no sentían ningún placer como señalaban algunos médicos de la Antigüedad, sino más bien sentían un gran dolor y el lógico abandono del tratamiento. Además, los beneficiarios de estos tratamientos era el patriarca, ya que así controlaba más aún a la mujer, y los farmacéuticos, que obtenían mayores ganancias con la venta de las píldoras de hierro.
Por otra parte es importante destacar que la imagen de la mujer desde la visión de la medicina está teñida de discriminación de género. La mujer siempre ha sido vista como un ser frágil, débil e incluso limitada por sus genitales. Hoy en día este asunto no ha cambiado demasiado ya que muchas mujeres tienen que sufrir de parte de los médicos diagnósticos de `nervios` o causas patológicas en patologías orgánicas claras. Esto tuvo su mayor apogeo entorno al siglo XIX. Época en la cual las mujeres debían ser delicadas, entregadas, sacrificadas y embarazadas.
Se observa que la mujer estaba reprimida y sometida a las malas condiciones de higiene y alimentación, al corsé que estrangulaba el tronco. Esta situación desembocaría en que las mujeres padecieran anemia, astenia y depresión más que los hombres.
Finalmente quiero añadir un hecho importante de esta época, y es que se consideraba que la clorosis tenía como solución el matrimonio, ya que decían que las relaciones sexuales estimulaban el aparato genital y afluía sangre hacía él. Además, se consideraba que la masturbación era otra posible causa de la aparición de esta enfermedad.
Bibliografía
Asun. Clorosis: un caso de violencia institucional. Salud y género (blog), 8 de enero de 2012. Disponible en https://elgeneroenlasalud.blogspot.com.es/2012/01/clorosis.html
Bernabeu-Mestre, Josep; Cid Santos, Ana Paula; Esplugues Pellicer, Josep Xavier; Galiana Sánchez, María Eugenia. Una enfermedad de mujeres: medicina e ideología en el ejemplo histórico de la clorosis. Symposium: Well-being as a Social Gendered Process. Session 3: Health [Modena, Italy, June 26th-28th, 2006]. Disponible en https://www.ub.edu/tig/GWBNet/ModenaPapers/BernabeuEsp.pdf
Carrillo, Juan L. Medicina vs Mujer o la construcción social de una enfermedad imaginaria: el discurso médico sobre la clorosis. Historia Contemporánea 2007; 34: 259-281. Disponible en https://www.ehu.eus/ojs/index.php/HC/article/view/4153/3703.
Murillo-Godínez, Guillermo. La clorosis. Enfermedad (es) ¿desaparecida (s)? PortalesMedicos.com (blog), 31/05/2012. Disponible en https://www.portalesmedicos.com/publicaciones/articles/4387/1/La-clorosis-Enfermedad-es-desaparecida-s.html
Martínez Quesada, Carlos . Berta Wilhelmi y el sanatorio antituberculoso de la Alfaguara. Gomeres: salud, historia, cultura y pensamiento [blog]. 6/12/2015. Disponible en https://index-f.com/gomeres/?p=1228
Biografía
Berta Wilhelmi de Dávila nació en Heilbronn (Alemania) en 1858. Fue a la edad de los 12 años cuando junto con su familia, formada por su padre D. Fernando Wilhelmi, su madre Dña. Carolina Henrich, y su hermanastro Fernando, hijo del primer matrimonio de D. Fernando, llega a Granada. Entre uno de los motivos, si es que no fue el único, de su llegada a esta ciudad fue la construcción de una fábrica de papel tras haberse incendiado la que poseían en su ciudad de origen (1). Su mentalidad la podemos englobar dentro del Feminismo. Es muy probable que parte de culpa de esta la tenga el ambiente familiar liberal y laico y la cultura germánica de los que recibió influencia (2).
Poco más se sabe sobre su época juvenil. Nos tenemos que remontar hasta una fecha desconocida en la que se produjo las primeras nupcias con D. Fernando Dávila Zea, perteneciente a la noble familia granadina de Ponce de León. De este matrimonio surgieron sus dos hijos: Luis y Berta. Años más tarde se produjo la separación de este primer enlace ya que posteriormente se volvería a casar, en esta ocasión, con D. Eduardo Domínguez, trabajador de la Fábrica de papel, aunque esta relación también finalizó.
Como anteriormente hemos mencionado, su espíritu feminista se fue confirmando con sucesivos hechos. En 1892 se inauguró en Madrid el 13 de octubre (3), enmarcado en las conmemoraciones del Cuarto Centenario del descubrimiento de América, el Congreso Pedagógico Hispano-Portugués-Americano (4,5), donde la Señora Wilhelmi expuso una ponencia sobre «La aptitud de la Mujer para todas las profesiones» (6).
Otro hecho que corrobora tal espíritu se corresponde al círculo social del que se rodea, destacando de entre todos sus amigos el nombre de Fernando de los Ríos, el cual se comprometió más adelante con el Partido Socialista. Tal fue la fuerte amistad que les unió que Fernando, a su llegada a Granada en 1911, se hospedó en la casa que Berta habitaba en el Paseo de la Bomba, aunque no fue hasta octubre de 1912 cuando se estableció en esta ciudad (7).
Un tercer hecho, que se pueda constatar, es su contacto con la Institución Libre de Enseñanza, la cual se hizo patente por medio de la Primera Colonia Escolar (8), aunque la idea de esta emanase de la Sociedad Económica de Amigos del País de Granada (9) y del Museo Pedagógico. Esta Colonia fue posible gracias a la organización de esta por Berta junto a D. Cayetano del Castillo, así como las dotaciones económicas procedentes de la propia Sociedad Económica, Diputación, Ayuntamiento de Granada, Ayuntamiento de Almuñécar y de personas particulares. Tanto la Memoria de la 1ª Colonia como las sucesivas fueron publicadas en el Boletín del Instituto Libre de Enseñanza (B.I.L.E.) (10,11).
El lugar que Berta escogió para establecer las Colonias fue Almuñécar, zona idónea para llevar a cabo actividades al aire libre, excursiones y ejercicio físico así como para reforzar las ideas de descanso, alimentación, aseo corporal como componentes educativos básicos tan defendidas por ella. Entre 1912 y 1913 construyó en Pinos Genil, con dinero propio, una escuela mixta y una biblioteca con una dotación de unos 600 volúmenes, y en 1913 quedaron inauguradas ambas. En la actualidad, el ayuntamiento de Pinos Genil está construido sobre el solar donde se ubicó el colegio (12). De la Biblioteca no queda nada.
Continuó con su labor filantrópica y educadora en sus años posteriores, en concreto, hasta el 1931, cuando sufrió un derrame cerebral que la obligaría a dejar su actividad social. Se mantuvo así hasta el 29 de julio de 1934, fecha de su defunción. Se enterró, sin lápida, en el Cementerio de Granada. Su familia llevó a cabo su última voluntad que consistió en donar a los pobres todos los gastos que ocasionaba un entierro. Fue tal su labor que su huella se quedó grabada en la mente de todas aquellas personas que la conocieron, inclusive, recibiendo reconocimiento de importantes representantes de instituciones como el Defensor de Granada, así como, del alcalde de la ciudad.
Lucha contra la Tuberculosis
Antes de tratar una parte muy importante de su labor filantrópica como fue la lucha contra la Tuberculosis, quisiera aportar algunos datos sobre esta enfermedad en España de principios del siglo XX.
Según la OMS “la tuberculosis es causada por Mycobacterium tuberculosis, una bacteria bacilo que casi siempre afecta a los pulmones”, ya que puede afectar a otros órganos propagándose así a columna, vejiga, cerebro, pericardio, articulaciones, riñón, órganos reproductores, cavidad abdominal (13). Antes de continuar con la descripción clínica, vamos a conocer unos cuantos datos históricos acontecidos en España sin antes olvidarnos mencionar al descubridor del bacilo causante de la Tuberculosis como fue el premio Nobel y bacteriólogo alemán Robert Koch, en concreto, en el año 1882 (14).
Aunque es cierto que la Tisis tuvo gran incidencia entre finales del siglo XIX, conocida como la Peste Blanca (15), y la primera mitad del siglo XX, no hay que obviar su carácter arcaico ya que es una de las enfermedades más antiguas de la que se tenga constancia. Tanto es así que se llegaron a descubrir indicios de lesiones tuberculosas en esqueletos de la Edad de Piedra y del Antiguo Imperio Egipcio (16).
En España, la industrialización facilitó la difusión de dicha enfermedad al coincidir varios factores precipitantes tales como la aglomeración de la clase obrera en barrios periféricos insanos, jornadas laborales extenuantes desarrolladas en condiciones antihigiénicas, la escasa cobertura sanitaria facilitada por el Estado y una alimentación deficiente. Todo esto llevó a considerarla como enfermedad social. Así como esta realidad era patente, surgieron, hasta 1936, Asociaciones y Organizaciones en la lucha antituberculosa, emanando así, en 1903, la primera asociación: la Asociación Antituberculosa Española (AAE) (17).
A medida que fueron pasando los meses durante la Guerra Civil fue empeorando la de por sí negativa situación creada por esta lacra, sobre todo, en las zonas rebeldes. La guerra trajo consigo además de miseria y muerte la facilitación de la transmisión de la tuberculosis (17). Como dato de interés, destacar una tesis doctoral realizada en el Laboratorio de Antropología de la Universidad de Granada. Dicha tesis analizó las defunciones producidas en Granada y las principales causas (la tuberculosis y bronquitis) de fallecimiento en el siglo XX, destacando un dato curioso: las horas más frecuentes para morirse fueron entre las 12 y las 18 horas (18).
Descripción clínica. El modo de propagación es de persona a persona a través del aire, ya sea por tos, estornudo o esputo. La Tuberculosis tiende a ser latente; es decir, una persona puede estar infectada por el bacilo sin estar enferma ni transmitir la infección. Cuando esta se presenta, los síntomas (tos, fiebre, sudores nocturnos, pérdida de peso, dolores torácicos, debilidad, etc.) pueden ser leves por muchos meses. Esto hace que los enfermos antes de encontrar atención médica hayan transmitido la bacteria a otras personas. Entre los grupos de riesgo los adultos jóvenes son los que tienen mayor probabilidad de padecerla. También tienen altas posibilidades aquellas que están infectadas por el VIH y aquellas que tienen el sistema inmunitario deteriorado (19).
Diagnóstico. El primer paso para dar un posible diagnóstico de tuberculosis es la realización de una radiografía de tórax, la cual se presenta como anormal ya que la enfermedad se manifiesta como zonas blancas irregulares. También se realiza la prueba cutánea de la tuberculina (mantoux) y el examen de esputo, en el que se busca Mycobacterium tuberculosis. Aunque la prueba de la tuberculina sea una de las más fiables, solo señala que en algún lugar del organismo hay bacterias tuberculosas vivas.
Para corroborar de forma segura la presencia de esta enfermedad y la determinación del bacilo es necesaria la obtención de una muestra de esputo, líquido infectado o tejido para analizarla en el laboratorio (13).
Tratamiento. La tuberculosis es una enfermedad que se puede tratar y curar mediante la combinación y administración de cuatro antibióticos diferentes durante seis meses junto con información, supervisión y apoyo del paciente por un agente sanitario (19).
Sanatorio de tuberculosos de la Alfaguara
De entre una de las actividades filantrópicas de Berta Wilhelmi destacamos el Sanatorio de tuberculosos de la Alfaguara. No dudamos en absoluto de la voluntad de Berta por luchar contra esta enfermedad sino que muy posiblemente tuviera mucho que ver el haber perdido a su hermano Luis, a la edad de doce años, por esta enfermedad. Fue el primer paso para llevar a cabo este proyecto (20). Dejando a un lado esta suposición, hay que ser rigurosos a la hora de establecer el origen exacto de este proyecto. Para encontrarlo nos tenemos que remontar al verano de 1919 y al lugar geográfico de El Purche (1.500 m. sobre el nivel del mar), donde se construyó una casita llamada «Las Acacias», en el que se albergó a ocho enfermas. Fue allí, donde, en 1920, surgió la idea del Patronato Antituberculoso de la Alfaguara, trampolín último para la creación, en mayo de 1923, del Sanatorio y dispensario de la Alfaguara (1) en la zona Haza del Pinar a (1.400 m. sobre el nivel del mar).
Fue tal la expectación que asistieron personalidades, tales como el gobernador militar, el gobernador civil, el arzobispo, catedráticos, médicos, decanos y representantes del Ayuntamiento de Granada y de Alfacar, además de un numerosísimo público.
El sanatorio estaba formado por dos plantas y veinticuatro camas, doce para hombres y doce para mujeres. Los muebles fueron donados por la reina Victoria Eugenia, presidenta de la Cruz Roja de Damas. La mayoría de las plazas que se ofrecían eran gratis y otras a media pensión costaban 3 pesetas. Las instalaciones disponían de salas de consultas, salas de cura, de cirugía general, de otorrinolaringología, terraza, galería de reposo, calefacción a vapor, pararrayos, agua corriente, cocinas y cuartos de baño.
Tardó bastante en llegar el reconocimiento a toda su labor altruista, siendo en Noviembre de 1923 cuando se le otorgó a Berta Wilhelmi la Gran Cruz de la Orden Civil de Beneficencia (20).
En 1926 tuvieron lugar dos acontecimientos, por un lado, la inauguración el 16 de mayo, en el parque del Sanatorio, del Pabellón «Luis Dávila» para niños que llevará el nombre de su hijo fallecido en marzo de 1925 en un accidente de aviación; y por otro, la creación de la Junta Provincial de la lucha antituberculosa en Granada (1).
El Sanatorio funcionó hasta la Guerra Civil y la postguerra bajo la dirección de Helene Bickman Alterhoff (20). Debido a que a unos 1.000 metros de la zona donde se ubicó el edificio tuvo lugar uno de los frentes de la Guerra, este terminó abandonado y prácticamente derruido (21).
Bibliografía
1. Ballarín Domingo, Pilar. «Feminismo, educación y filantropía en la Granada de entre siglos: Berta Wilhelmi» En: Ballarín, P.; Ortiz, T. (eds.). I Encuentro Interdisciplinar de Estudios de la Mujer: la mujer en Andalucía. Granada: Universidad de Granada, 1990. (Feminae; 3). pág. 342. Disponible en https://hdl.handle.net/10481/34728.
2. Ballarín Domingo, Pilar. «Bertha Wilhelmi y su defensa de la aptitud de la mujer para todas las profesiones». Arenal. Revista de historia de las mujeres. 1998; 5(1): 192. Disponible en https://hdl.handle.net/10481/22263
3. Fernández Poza, Milagros. «El debate educativo de finales del ochocientos y el Congreso Pedagógico Hispano-Portugués-Americano». Cuadernos de Historia Contemporánea 2007, vol. Extraordinario, 81-92: 84. Disponible en https://www.juntadeandalucia.es/educacion/vscripts/wginer/w/rec/3268.pdf
4. «La Institución Libre de Enseñanza y su aportación a la educación de la mujer española», apartado 1.2.2.2. El Congreso Hispano-Portugués-Americano de 1892. Disponible en https://goo.gl/LaF8AH.
5. Jagoe, Catherine; Blanco, Alda; Enríquez de Salamanca, Cristina. «La mujer en los discursos de género: textos y contextos en el siglo XIX», Ed. Icaria, 1998, p. 197. Disponible en https://goo.gl/lf8jGA.
6. Wilhelmi de Dávila, Bertha. «Aptitud de la mujer para todas las profesiones» Madrid: [s.n.], 1893 (Fortanet). Disponible en https://hdl.handle.net/10481/28089.
7. Fundación Fernando de los Ríos. Biografía. Disponible en https://goo.gl/zIHucl.
8. Wilhelmi De Dávila, Bertha. «La Primera Colonia Escolar Granadina: memoria presentada por su directora Bertha Wilhelmi de Dávila á la Real Sociedad Económica de Amigo del País: Septiembre de 1890». Ed. Granada: [s.n.]. 1891 Disponible en https://hdl.handle.net/10481/22396.
9. «Fondo de la Sociedad Económica de Amigos del País de Granada». 1775-1934 Disponible en https://archivo.ugr.es/pages/fondos/fondo_soceconomica.
10. Jiménez-Landi Martínez, Antonio. «La Institución de libre Enseñanza y su Ambiente». Tomo III. Periodo Escolar (1881-1907) pág. 110 Disponible en https://goo.gl/VRrrlG.
11. Martínez Medrano, Eulalia. «El Boletin de La Institución de Libre de Enseñanza (B.I.L.E.)» [https://www.juntadeandalucia.es/educacion/vscripts/wginer/w/rec/3044.pdf].
12. Garzón Cardenete, José Luis; Granados Palacios, Alberto. “Cien años del colegio Berta Wilhelmi de Pinos Genil”. Ideal.es (blog), 25 marzo, 2013. Disponible en https://granadablogs.com/granadarecuerdasuscosas/tag/colegio-publico-berta-wilhelmi/.
13. Sin autor. Tuberculosis. MSDsalud. S/a. Disponible en https://www.msdsalud.es/manual-msd-hogar/seccion-1/tuberculosis.html.
14. Sin autor. “Robert Koch y la bacteriología moderna”. La Medicina en la historia. Unidad 2: El proceso histórico de las ciencias de la salud. S/a. Disponible en https://www.juntadeandalucia.es/averroes/~29701428/salud/koch.htm.
15. Berlanga Gómez, Antonio. «Incursión a lo desconocido» Editorial: S.L. Punto Rojo Libros, 25/04/2014. Disponible en https://goo.gl/rMrreo.
16. Vidal, Pilar. «La peste blanca, una asesina ancestral» Periódico “La Opinión A Coruña”, 29/03/2013. Disponible en https://goo.gl/qqaqnA.
17. Palao Ibáñez, María del Carmen. «Una perspectiva social de la tuberculosis en España: 1900-1939» pág. 2,4 Universidad Complutense de Madrid. Disponible en https://goo.gl/pf8TaI.
18. Canal UGR. Recursos de información y comunicación. Fuente: Redacción Periódico Granada Digital, 12/03/2009. Disponible en https://goo.gl/ygPrDP.
19. OMS. “Tuberculosis”. Organización Mundial de la Salud, Nota descriptiva N°104, Octubre de 2015. Disponible en https://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs104/es/.
20. Puertas Única, María Belén. «Remembranzas de la Alfaguara», [blogdebelenpuertas.blogspot.com.es] 26/05/2010 Disponible en https://goo.gl/Wx0RRK.
21. Hospitales y sanatorios abandonados (España) [laexuberanciadehades.wordpress.com] Disponible en https://goo.gl/D6SgRg.
Esta entrada ha sido realizada por alumnado de 1º de Enfermería de la Universidad de Granada en el marco de la asignatura “Evolución Histórica de los Cuidados. Teorías y Modelos”, curso 2015-16.
Anunciamos las próximas visitas que vamos a realizar por la Granada Hospitalaria (la segunda de ellas ha variado de fecha)
ITINERARIO 1 El Hospital Real y la Biblioteca Universitaria
Fecha: 4 de diciembre de 2015
Punto de encuentro: zaguán de entrada del Hospital Real (sede del rectorado de la UGR, c/ Cuesta del Hospicio, detrás del Triunfo)
Hora: 12: 15 h
Itinerario 2 Tras los pasos de Juan de Dios y hospitales de patronato
Fecha: 15 de diciembre de 2015
Punto de encuentro: zaguán de entrada del Hospital de San Juan de Dios (calle San Juan de Dios, esquina con c/ Rector López Argüeta, no confundir con Hospital de San Rafael)
Hora: 15:30 h
Este segundo itinerario ha variado la fecha por motivos de organización, así pues no será el 9 sino el 15 de diciembre. Si alguien de los inscritos en el día 9 no puede hacerla en la nueva fecha debéis comunicarlo de manera urgente a vuestro profesor (mamezcuam@ugr.es) anulando la visita, de lo contrario se os considerará a efectos de selección.
Selección
Dado que las plazas son limitadas, y son muchas las solicitudes recibidas, será necesario realizar una selección que haremos siguiendo el estricto orden de inscripción y teniendo en cuenta el número de asistentes de cada grupo (también se procurará que pueda optarse al menos a una de las visitas programadas). Si un grupo no cubre las plazas asignadas, se distribuirán equitativamente en el resto de grupos.
Los alumnos que no hayan logrado entrar en una primera selección, quedarán como suplentes de su grupo para cubrir las posibles renuncias que se produzcan. Si finalmente hubiere suficientes alumnos para realizar nuevas visitas, intentaremos programarlas más adelante.
Los alumnos que aún no han realizado su inscripción, pueden hacerla enviando un correo al prof. Amezcua (mamezcuam@ugr.es). El listado de admitidos de la primera visita se publicará el lunes 30 de noviembre por la mañana.
AVISO
Aquellos alumnos que por alguna circunstancia no pudieran acudir a la visita deberán comunicarlo a la mayor brevedad posible (mamezcuam@ugr.es) con el objeto de incorporar a suplentes.
Se ruega puntualidad. De cara a realizar la galería fotográfica correspondiente a la visita, os pedimos que os llevéis vuestras cámaras y realicéis fotografías a todo aquello que os llame la atención, pero procurando que también aparezcamos los visitantes, no solo los monumentos.
Autoras: Ángela Ruiz Calvo1º C (2015/16), Isabel Béjar Fernández, 1º B (2015/16)
La Hirudoterapia es el nombre que recibe la técnica utilizada para curar males mediante estos anélidos. Así se conoce al tipo de anélido, pariente de las lombrices que vive en medio terrestres, marino y de agua dulce. Estas han tenido uso curativo desde la época de Hipócrates, lo sabemos debido a pinturas y jeroglíficos que se han encontrado en cavernas y pirámides egipcias.
¿Qué son las sanguijuelas?
Las sanguijuelas son animales invertebrados de apariencia viscosa y poco atractiva, pertenecientes a la familia de los anélidos. Están constituidas por treinta y cuatro segmentos y pueden pegarse a los cuerpos de los cuales chupan la sangre gracias a potentes ventosas. En su saliva están presentes una serie de enzimas y compuestos que entran al organismo a través de la incisión. Algunos de ellos como la hirudina, funcionan como anticoagulante, permitiendo la disolución de coágulos encontrados en los vasos sanguíneos.
También inocula un anestésico local que impide que la mordedura sea tormentosa así como compuestos antimicrobianos y agentes vasodilatadores que ayudan a abrir las paredes de los vasos mediante la dilatación de los mismos, haciendo que la sangre fluya sin obstáculos. Las enzimas que presenta son enzimas proteolíticas que ingieren el tejido dañado. Numerosos microorganismos son digeridos y finalmente destruidos en el intestino de la sanguijuela. Utilizadas en el pasado para las sangrías, estos animales siguen siendo utilizados en el campo de la medicina para obtener sustancias coagulantes.
Las sanguijuelas en la historia
Desde la antigüedad, estos pequeños anélidos se usaron para el tratamiento de muchas enfermedades a través de derramamiento de sangre, un método en el que se saca la sangre con la esperanza de que la extracción de sangre impura pueda curar el cuerpo. Fueron ampliamente utilizadas hasta el siglo XIX como remedio para todo ya que se pensaba que sacaban del cuerpo los »vapores del demonio».
En la Medicina Antigua se creía en la teoría de los cuatro humores: sangre, flema, bilis amarilla y negra. Cuando se modificaban de alguna forma los cuatro humores se originaba la patología humoral donde en el proceso de curación, el concepto de evacuación tenía gran importancia. Un evacuante importante en la época fueron las sanguijuelas, pequeños gusanos de fácil obtención ya que estaban presentes en la mayoría de charcas, ríos y arroyos.
Son invertebrados de tipo anélido, con forma cilíndrica y que suelen tener una longitud de entre 3 y 5 centímetros. Su color es bastante desagradable, un color negro, café o verde oscuro. Lo más característico de estos animales es la ventosa bucal que poseen en forma de disco en la que se encuentran dientes utilizados para extraer la sangre.
La hipótesis era que al drenar parte de la sangre de alguna manera se podía restaurar el balance del cuerpo y curar virtualmente cualquier enfermedad. Ya en la Edad Media, los edemas que aparecían en los peregrinos que recorrían el camino de Santiago eran aliviados mediante baños de agua en ríos en muchas ocasiones poblados de sanguijuelas. En algunos textos medievales encontramos la forma de elegir las sanguijuelas destinadas a fines curativos. Entre los criterios de validez encontramos el lugar de cría de la sanguijuela, descartando aquellos lugares mal olientes y escogiendo aquellos arroyos dotados de agua cristalina; así como la morfología de la sanguijuela que nos permitía distinguir las benignas de la venenosas.
Además encontramos datos proporcionados por personajes como Avicena, filósofo, médico y científico persa que vivió entre los años 980 y 1037 que nos ayudan a comprender cómo era la elección de este tipo de sanguijuelas destinadas a la curación, así como técnicas de aplicación de estos pequeños anélidos. Avicena entre sus múltiples recomendaciones aconseja frotarse la zona intensamente para que la sangre llegue y se abran los poros y a continuación, aplicar la sanguijuela. También nos habla del mantenimiento de las sanguijuelas que debían permanecer en ayunas al menos un día antes.
En estos tiempos existían mercados de sanguijuelas que proporcionaban estos anélidos a profesionales para realizar la terapia. Estas sanguijuelas eran suministradas por cazadores de sanguijuelas. Actualmente, los cirujanos que reimplantan dedos y orejas han observado que los pacientes se curan más rápidamente con la ayuda de estos animales.
¿Por qué funcionan las sanguijuelas?
Las sanguijuelas han sido utilizadas a través del derramamiento de sangre, método que consistía en extraer la sangre con la esperanza de que al extraer la sangre impura pudiese curar el cuerpo. Esta técnica es en muchas ocasiones la mejor alternativa para tratar enfermedades y puede incluso superar tratamientos farmacológicos. Esta terapia, continua en uso para muchas enfermedades como son la artritis y otros procesos inflamatorios. Además, son muy útiles para pacientes con enfermedades vasculares, pulmonares, neumonía e incluso puede ayudar a pacientes que tienen enfermedades del tubo digestivo.
Se consideran propiedades de las sanguijuelas:
-Anticoagulantes: en la saliva de estos anélidos encontramos hirudina, agente que consigue inhibir la coagulación de la sangre.
-Antiinflamatorio: también en la saliva de estos animales encontramos bdellins, compuesto mediante el cual al inhibir tripsina y plasmina actúa como anti-inflamatorio.
-Anéstésicos: la saliva además tiene sustancias anestésicas que calman el dolor.
-Vasodilatadores: histamina, acetilcolina e inhibidores de la carboxipeptidasa actúan para ampliar los vasos y proporcionar un mejor flujo.
La terapia con sanguijuelas curativas
Por sorprendente que parezca, la terapia con sanguijuelas funciona en muchos casos donde otras terapias farmacológicas no han dado resultado. Se utilizan para tratar problemas de estómago, se aplican en pacientes con hipertensión vascular y problemas cardiovasculares. También en procesos inflamatorios del organismo y trastornos de las vías respiratorias así como para estimular el flujo sanguíneo en los injertos de piel tras una operación de cirugía estética. Dicha terapia se está aplicando en numerosos países, incluyendo España, en donde su uso es una realidad en hospitales y servicios muy concretos.
Está desaconsejada para los pacientes con el VIH o con problemas inmunológicos, en pacientes que están tomando medicamentos inmunosupresores ya que el tratamiento pone a estas personas en peligro de sepsis bacteriana y por lo tanto, empeora sus condiciones.
Como ya hemos visto, en la Edad Media las sanguijuelas eran usadas con el fin de curar ciertos males en las personas, pero resulta sorprendente que esta terapia alternativa siga vigente en nuestros días más allá de toda una conceptualización falsa de espíritus malignos y fuerzas demoníacas. Observamos cómo este tratamiento indispensable, que por un tiempo fue considerado un tratamiento sin valor, atrasado y decadente debido al gran avance científico, ha reaparecido con más fuerza que nunca en ámbitos como la microcirugía plástica reconstructiva.
Ejemplos de usos curativos
En las reimplantaciones de dedos y orejas :
Para tratar un derrame en un paciente sufrido tras una operación:
Autora: Ana González García, 1º A (2015/16) Ver addenda al final
Introducción
Se trata de una enfermedad de transmisión sexual, producida por una bacteria (Treponema Pallidum), la cual infecta el área genital, los labios, la boca o el ano, afectando por igual a hombres y mujeres. Además, esta puede transmitirse de la madre al bebé durante el embarazo.
La etapa temprana de la sífilis suele causar una llaga única, pequeña e indolora. Algunas veces, causa inflamación de los ganglios linfáticos cercanos. Si no se trata, puede causar una erupción cutánea que no pica, generalmente en manos y pies. Hay personas que no llegan a notar los síntomas durante años. Si no se trata, esta progresa por cuatro etapas (primaria, secundaria, latente y terciaria o tarde), teniendo cada una sus propios signos y síntomas únicos. Es curable hoy en día con antibióticos.
Historia
La sífilis fue denominada en un pasado como enfermedad francesa o morbus gallicus. Fue causante de la muerte de una gran cantidad de personas en todos los tiempos. Los marinos habrían sido los responsables de difundir esta enfermedad. En 1530, fue bautizada como sífilis, por una poesía didáctica de un médico italiano, Girolamo Fracastorius, de Verona, en la que el pastor Syphilus fue castigado con la enfermedad por llevar una vida inmoral y llena de vicios. Sin embargo, fue llamada durante mucho tiempo como enfermedad de los franceses, ya que los soldados del rey francés Carlos VIII murieron a comienzos del siglo XVI por una epidemia de sífilis durante el sitio de Nápoles.
El tratamiento que se empleó desde el siglo XV hasta el siglo XX, consistía en un tratamiento con mercurio, el cual se prolongó hasta comienzos de la II Guerra Mundial, donde se planteó un cambio del mercurio por el bismuto, al considerarse más eficaz.
A mediados del siglo XIX, consideraban la administración de mercurio como básica para el diagnóstico y curación de la sífilis. Antes de la I Guerra Mundial, se mantenía la idea de que solamente podíamos apoyarnos en el uso de mercurio, bien por vía oral (en forma de sales como el calomel), mediante fricciones, por inyección intramuscular y por inhalación vapores de mercurio.
Por otra parte, la II Guerra Mundial cambió el tratamiento de la sífilis, gracias a la aparición de los antibióticos (descubrimiento de la penicilina en 1943), excluyéndose el mercurio, bismuto y arsénico.
Además, no son pocos los personajes históricos conocidos que contrajeron esta enfermedad. El caso más conocido es el del filósofo Friedrich Nietzsche, aunque también literatos como Rimbaud, Baudelaire, Wilde, Tolstoi o Verlaine; pintores como Goya o Van Gogh; y otro tipos de personajes como Catalina de Rusia, Al Capone, Mussolini o Martín Alonso Pinzón. Se especula que muchos otros como Shakespeare, Beethoven, Colón, Napoleón, Bolívar, Lincoln y Hitler.
Etapas de la enfermedad
Etapa primaria. Tras un período de incubación de unas 3 semanas, aparece la lesión primaria (llaga o ampolla) o chancro, el cual se caracteriza por ser de base limpia y poco o nada dolorosa. Estos suelen aparecer en los genitales externos, el cuello uterino, la boca… Además, suele aparecer un agrandamiento moderado de un ganglio linfático, acompañando a esta lesión primaria. Esto suele durar entre 1 y 5 semanas, ya que pasado este tiempo, sanará y desaparecerá, con o sin tratamiento, aunque evidentemente la enfermedad perdurará si no es tratada.
Etapa secundaria. Se desarrolla desde los 17 días a los 6 meses y medio después de la infección, tras aproximadamente de 2 a 8 semanas de la aparición del chancro. Esta fase suele comenzar con la aparición de una erupción en una o más áreas del cuerpo. Suele tomar aspecto de puntos duros, de un tono rojo o marrón rojizo en las palmas de las manos y las plantas de los pies. Esta erupción, por lo general, no pica e incluso hay ocasiones en las que son tan poco visibles, que es posible que uno no se percate de su presencia. Otros síntomas presentes en esta etapa, son la fiebre, inflamación de las glándulas linfáticas, dolor de garganta, pérdida parcial del cabello, dolor de cabeza, pérdida de peso, dolor muscular y fatiga. Al igual que la fase anterior, estos síntomas desaparecerán con o sin tratamiento, pero la enfermedad seguirá avanzando.
Etapa latente. Los síntomas mencionados en las etapas anteriores desaparecen. Esta fase latente puede prolongarse por años y reaparecer cuando no hay tratamiento (10 o 20 años después). Se trata de una fase muy avanzada de la enfermedad, la cual puede afectar a órganos internos como: nervios, vasos sanguíneos, corazón, hígado, cerebro, ojos, huesos y articulaciones. Los síntomas que producen pueden ser dificultades para coordinar los movimientos musculares, entumecimiento, parálisis, demencia, ceguera gradual e incluso en casos extremos, la muerte.
Etapa terciaria. Puede ocurrir de los 2 a más de 30 años tras haber cogido la infección. Sus complicaciones pueden ser:
-Pequeños tumores en la piel, huesos u órganos.
-Complicaciones del corazón y vasos sanguíneos.
-Desordenes crónicos del sistema nervioso (ceguera, locura, parálisis).
Existe tratamiento para esta etapa, aunque el daño por las complicaciones no es reversible. No obstante, la progresión de la enfermedad puede detenerse.
Diagnóstico
La sífilis puede ser detectada mediante una prueba de sangre o mediante fluido de las lesiones. Las personas que padecen dicha enfermedad, se les recomienda hacerse la prueba del VIH, ya que estas lesiones pueden causar fácilmente la transmisión del VIH.
Tratamiento
El tratamiento más comúnmente utilizado es la dosis única de bencilpenicilina benzatina, por vía intramuscular, cuando la sífilis se ha prolongado por menos de 1 año. Si esta se ha prolongado por un período de tiempo más largo a este, serán necesarias dosis adicionales.
A día de hoy, los casos de sífilis han aumentado. Según la OMS, se dan 12 millones de infecciones nuevas cada año, 3 de ellos en América Latina y el Caribe. En España, se contagian anualmente 8 de cada 100.000 habitantes, según el Instituto de Salud Carlos III, lo que supone que se han doblado los casos en tan solo seis años.
El término sífilis viene de una historia, donde un pastor llamado Syphilus fue castigado con una nueva enfermedad porque levantó altares prohibidos. Durante la Edad Media, la sífilis afectó a grandes cantidades de población. Sin embargo, cuando se empezó a utilizar la penicilina para curarla, la pandemia fue debilitándose.
En cuanto al origen de la enfermedad, los investigadores están divididos en dos grupos. El primero dice que la sífilis llegó a Europa desde América cuando se produjo el descubrimiento de esta última. Durante el sitio de Nápoles, se dice que los soldados españoles infectaron a las prostitutas del lugar y estas a su vez a los soldados franceses. Por lo que estos últimos se rindieron debido a la enfermedad. Es por eso que también se le puede llamar «morbo gallico».
A principios del siglo XV, un 15% de la población europea tenía sífilis. Fracastorus fue el hombre que empezó a llamarle Sífilis a la enfermedad y recomendó tomar guavacol y mercuriales para tratarla. Por otro lado, Paracelso se dio cuenta que las mujeres sifilíticas tenían hijos sifilíticos. En esta época, la gente que padecía sífilis se la consideraba que pecaba de lujuria y por lo tanto, la enfermedad era un castigo divino.
El segundo grupo de investigadores habla sobre el origen de la enfermedad mucho antes del Descubrimiento de América. Esto se puede justificar con escritos y manifestaciones artísticas antiguas. Por lo que, la hipótesis aceptada es esta última.
A lo largo de los siguientes siglos, la enfermedad siguió expandiéndose. Sin embargo, hubo un aumento considerable de personas con sífilis en los países occidentales a partir de 1955. Entre los años 1958 y 1960 hubo un descenso de esta enfermedad, y ocurrió otro aumento a partir de los años 70. A partir de esta época, se habló de la existencia de millones de sifilíticos repartidos en forma desigual alrededor del mundo, debido a la mezcla de poblaciones distintas y a los puertos, los cuales son grandes almacenes de treponemas.
FUENTE
Berdasquera Corcho, Denis; Lazo Álvarez, Miguel Ángel; Galindo Santana, Belkys María; Gala González, Angela. Sífilis: pasado y presente. Revista Cubana de Higiene y Epideiología 2004; 42 (2). Disponible en https://bvs.sld.cu/revistas/hie/vol42_2_04/hig08204.htm
La lepra es una enfermedad infecciosa crónica causada por un bacilo acidorresistente llamado Mycobacterium leprae. Afecta principalmente la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías respiratorias altas y los ojos. Se trata de una enfermedad curable. Si se trata en las primeras fases, se evita la discapacidad. La lepra tiene dos formas comunes: la tuberculoide y la lepromatosa. Ambas formas ocasionan úlceras en la piel, pero la forma lepromatosa es la más grave y produce grandes protuberancias e hinchazones (nódulos).
Desde 1995, la OMS proporciona gratuitamente a todos los enfermos leprosos del mundo el tratamiento multimedicamentoso, que es una opción curativa simple, aunque muy eficaz, para todos los tipos de lepra. La eliminación mundial de la lepra (es decir, una tasa de prevalencia mundial de menos de 1 caso por 10 000 habitantes) se alcanzó en el año 2000. A lo largo de los últimos 20 años, con el tratamiento multimedicamentoso se ha conseguido curar a cerca de 16 millones de pacientes con lepra.
Breve historia de la enfermedad y su tratamiento
La lepra ya era conocida por las antiguas civilizaciones de China, Egipto y la India. La primera referencia escrita a esta infección se remonta aproximadamente al año 600 a.C. A lo largo de la historia, los enfermos leprosos se han visto condenados al ostracismo por sus comunidades y familias.
En el pasado el tratamiento de la lepra era distinto. El primer avance importante se realizó en los años cuarenta con la obtención de la dapsona, medicamento que detuvo la enfermedad. No obstante, la larga duración del tratamiento —de años o incluso durante toda la vida— dificultaba su cumplimiento. En los años sesenta, M. leprae empezó a manifestar resistencia a la dapsona, el único medicamento antileproso conocido por entonces. A principios de los años sesenta se descubrieron la rifampicina y la clofazimina, los otros dos componentes del tratamiento multimedicamentoso.
En 1981, un grupo de estudio de la Organización Mundial de la Salud recomendó el tratamiento multimedicamentoso a base de dapsona, rifampicina y clofazimina, asociación que elimina el bacilo y logra la curación.
Modos de transmisión
El contagio es de persona a persona por contacto directo y prolongado, entre 3 y 5 años. Se produce entre un enfermo no tratado con posibilidad de transmitir (no todos los que padecen lepra contagian) y una persona susceptible, es decir con una predisposición especial para enfermar. Según la estadística el 80% de la población posee defensas naturales contra la lepra y solo la mitad de los enfermos no tratados son contagiantes.
Las vías de transmisión incluyen principalmente, las secreciones respiratorias de una persona enferma y no tratada, y en menor medida en heridas de la piel y secreciones nasales.
Últimas leproserías
Aunque la lepra se puede curar desde los años cuarenta y los leprosos no sufren ya las deformaciones de antaño, la sociedad no ha despojado todavía a esta enfermedad de su estigma repulsivo y morboso. «Somos capaces de dar 500 pesetas por los leprosos, pero no de darles la mano», dice sor Montserrat, una religiosa que lleva 30 años en la leprosería de Fontilles (Alicante). En España, donde esta patología se considera erradicada, el número de afectados ronda los 5.000, pero solo 600 la padecen en activo.
El Sanatorio Leprológico de Fontilles -el otro que hay en España está en Trillo (Guadalajara)- se levantó a principios de siglo, en un lugar aislado de la serranía alicantina. Sus 130 pacientes forman una pequeña comunidad de leprosos cuyo horizonte no alcanza más allá del muro de tres metros de alto que la rodea. Hoy, con la lepra controlada en España, Fontilles se ha convertido en una residencia de ancianos con minusvalías provocadas por la enfermedad. Juana P. no recuerda su edad, pero aparenta más de 80 años. La encontraron hace dos en una cueva de Mallorca y fue trasladada a Fontilles, casi inválida por una lepra muy avanzada. Según José Terencio, director médico de Fontilles, su caso es «único en Europa, porque la enfermedad le ha afectado a la voz, un síntoma típico del enfermo de lepra medieval». Por eso habla tan bajito y murmura que se quiere ir a casa por Navidad, pero no tiene a nadie.
Los especialistas calculan que en España, en 1992, hay casi 5.000 afectados por la lepra, aunque José Ramón Gómez aclara que solo unos 600 están activos, es decir, desarrollando la enfermedad. «El resto ya se ha curado, pero continúa en tratamiento para evitar posibles recaídas», explica.
Vídeo con síntomas visuales
Fuentes
Sin autor. Lepra. Argentina: Ministerio de Salud, s/a. Disponible en https://www.msal.gob.ar/index.php/ayuda/187-lepra
Sin autor. Lepra. Organización Mundial de la Salud, 2014. Disponible en https://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs101/es/
Sin autor. Lepra. Medline Plus, s/a. Disponible en https://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/001347.htm
Sistiaga, Jon. Los últimos de una enfermedad maldita. El País, 14 de diciembre de 1992. Disponible en https://elpais.com/diario/1992/12/14/sociedad/724287607_850215.html