Este itinerario por la Granada hospitalaria se realiza en torno al Hospital Real (actual sede del rectorado de la Universidad de Granada), como ejemplo más destacado de las instituciones hospitalarias de patronato real. Fundado por los Reyes Católicos al tiempo de la conquista de la ciudad, el hospital ha prestado servicio de forma ininterrumpida hasta el siglo XX. Los contenidos de la visita ilustrarán el paso de la enfermería medieval, representada en Granada por los maristanes u hospitales destinados al cuidado de los moriscos, a la enfermería renacentista, que representan los hospitales reales fundados en Toledo, Santiago de Compostela y Granada . Como complemento los alumnos visitarán la Biblioteca Universitaria, ubicada en el propio Hospital Real, y particularmente el fondo bibliográfico dedicado a San Juan de Dios, instalado en la celda que ocupara cuando estuvo ingresado en la institución.
Fuentes documentales
-Cambil Hernández, Mª Encarnación. Los Hospitales de Granada (siglos XVI-XXI). Tipología, catálogo e historia. Granada: Editorial Universidad de Granada, 2010.
-Félez Lubelza, Concepción. El Hospital Real de Granada. Granada: Universidad, 1979.
-Valenzuela Candelario, José. El insigne y suntuoso Hospital Real de Granada. Dynamis 2003; 23: 193-219. y 2004; 24: 213-245.
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Primera visita: a determinar
Punto de encuentro: puerta de entrada (en el portal interior si está lloviendo)
Hora: 10:30 h
Debemos llevar: papel, bolígrafo, algo para echar fotos, y mucha curiosidad y ganas de aprender
[Escribe en la sección de comentarios tus impresiones, lo que más te ha gustado o te ha llamado la atención, lo que has aprendido]
En el mes de octubre, y aprovechando los días sin docencia por el cambio de facultad, el profesor Manuel Amezcua y un grupo de alumnos nos dispusimos a visitar el hospital Real. Actualmente este edificio es la sede del rectorado de la universidad de Granada, además también es una biblioteca universitaria y cuenta , en el crucero de su planta baja con un espacio amplísimo en el que normalmente se realizan exposiciones. Este edificio que actualmente es «emblemático» de la universidad de Granada (es donde por ejemplo se realiza la ceremonia oficial de apertura del curso) no siempre ha tenido las funciones que tiene en la actualidad.
Tal y como nos contaron durante nuestra vista este hospital s construyó para satisfacer la carencia de asistencia sanitaria en la que se encontraba inmersa la ciudad de Granada en el siglo XVI (no fue hasta el siglo XVII cuando se terminó totalmente). Es llamativo también que el hospital posea 4 patios, y que solo con observar la arquitectura tan diferente que presentan estos ya nos damos cuenta de que antaño tuvieron funciones distintas.
En este hospital además paso un tiempo interno Juan de Dios, cuando se le consideró como un inocente (loco); y es por ello que la biblioteca posee una pequeña «celda» en la que se encuentra una «pequeña biblioteca» sobre San Juan de Dios.
En la visita tuvimos ademas la posibilidad de examinar una copia del codex granatensis que fue sin lugar a dudas una de las cosas más llamativas de la visita.
En definitiva, durante la visita tuvimos la oportunidad de conocer un poco mejor la historia del hospital real y de los acontecimientos que han tenido lugar en él.
El Hospital Real fue la primera visita a un sitio importante como universitaria, y por supuesto, estaba a la altura de mis expectativas. Es una construcción impresionante donde cada piedra se colocó con una función. Un patio para los «inocentes» y otro para los demás enfermos fueron los lugares que más me llamaron la atención, y es que cada rincón de este Hospital está organizado, construido y decorado según para qué y por quién será utilizado.
Fue una visita muy enriquecedora desde el punto de vista de la Historia de la Enfermería ya que pudimos hacernos una idea de cómo se organizaban los cuidados enfermeros de aquella época.
Fue interesante descubrir cómo trataban a los locos llamados entonces “inocentes” (son llamados así porque se creía que no eran conscientes de lo que hacían) a los cuales los tenían encerrados en jaulas pequeñas y austeras. Un ejemplo de estos inocentes es nuestro San Juan de Dios, cuya celda (o recreación de esta) estuvimos visitando. Dentro de ella tienen la pequeña biblioteca sanjuanista donde podemos encontrar todos los libros que hablan de él, su vida, la Orden hospitalaria, sus obras, sus actos… y no solo en español sino también en portugués (su lengua materna).
También se guarda aquí uno de los bienes más preciados de Granada y es el Codex Granatensis, al cual estuvimos ojeando junto con nuestro profesor Manuel Amezcua.
Recomiendo sin duda acudir a visitar el Hospital Real a todo aquel que le interese la cultura hospitalaria de Granada.
Sin apenas conocer Granada, uno de los primeros contactos que tuve con la ciudad fue esta visita al Hospital Real que dicho sea de paso, tampoco sabía de su existencia. En una primera impresión, me recordó un poco a un monasterio, por los patios y la fachada de piedra, pero al ver la división del hospital en esas cuatro grandes y principales alas para controlar desde el centro a los enfermos entendí el sentido de esa estructuración. Por cierto, esa fue una de las cosas que más me llamó la atención. Otro elemento a destacar fue la custodia del hospital, que debía pertenecer a un matrimonio de enfermeros. También me sorprendió gratamente el nombre con el que se designaba a los locos en la Edad Media, eran llamados inocentes. Por último, este hospital, ahora Sede del Rectorado de la Universidad de Granada y de la Biblioteca Universitaria, guarda uno de los más valiosos ejemplares de la Universidad, el Codex Granatensis.
Recomiendo esta visita a todos aquellos interesados por la historia, no solo de la enfermería o de San Juan de Dios, sino también a los amantes de la ciudad de Granada.
En mi opinión, fue una visita bastante interesante. No sólo para obtener conocimientos a cerca de los antiguos ámbitos que se llevaban a cabo en lo que será nuestro futuro lugar de trabajo, un hospital, sino también para enriquecernos a nivel histórico.
Personalmente, me llamó realmente la atención la gran cantidad de símbolos y escudos que pude observar en todo el edificio y que se repetían constantemente, tales como el yugo y las flechas que simbolizaban a los Reyes Católicos, como la figura de esa fruta tan especial para esta ciudad, la granada, en el marco principal de la entrada.
Me parece fascinante cómo, edificios de tal antigüedad se mantengan hoy en día y nos proporcionen tantísimos conocimientos de nuestros antepasados y del contexto en el que vivían.
Espero poder volver a repetir la experiencia.
La verdad es que fue una primera visita muy enriquecedora. ¿Qué mejor lugar para comenzar nuestras visitas pedagógicas que un antiguo hospital, en el que estuvo nada más y nada menos que el patrón de nuestra facultad?
Hubo varias cosas que llamaron mi atención: la primera de ellas fue la inmensa biblioteca (que realmente no era tan grande, pero había tantísimos libros que era la sensación que te daba a primera vista), que podría pasar perfectamente como escenario de cualquier serie de época (quitando un par de cosas más modernitas). Otra cosa que me fascinó fueron los patios, la diferencia que existe entre unos y otros, hasta llegar al más simplista (aunque tiene su encanto), el de los inocentes. Por último, me llamó mucho la atención algunas cosas del Codex Granatensis, como que pensaran que los animales marinos eran iguales que los terrestres pero bajo del mar, lo cual permite ver el gran avance que se ha hecho a lo largo de los siglos sobre otros campos de la ciencia como puede ser la biología o la zoología.
Sin duda alguna es una visita recomendable para cualquiera que se sienta atraído tanto por la enfermería como por la historia.
El pasado martes realizamos una visita al Hospital Real con el grupo de voluntariado.
Sinceramente, disfruté mucho. Me pareció muy interesante la denominación de »inocentes» a aquellos que padecían enfermedades mentales.
También despertó mi curiosidad las condiciones tan precarias del Hospital, y cómo se le daba más importancia al mantenimiento del edificio que al de los cuidados de los enfermos en sí.
La Biblioteca es impresionante, la recomiendo a todo aquel que le apasionen los libros antiguos. Aunque no podamos consultarlos (debido a su estado) siempre podemos acceder a ellos digitalmente. 🙂
Araceli Jiménez Lara 1ºB
El pasado martes realizamos el primer Itinerario Pedagógico con una visita al Hospital Real y Biblioteca Universitaria. No la publicité porque decidí aprovechar la suspensión de las clases para realizar una primera reunión con el grupo de colaboradores, que tuvo lugar en la mencionada biblioteca.
Personalmente me resultó una experiencia muy satisfactoria y disfruté mucho observando el interés que todos pusisteis en la visita y en las explicaciones que nos ofreció la bibliotecaria Inés del Alamo, a quien agradecemos su implicación y gentileza. Y eso que tuvimos que soportar algunas «injerencias» que nos interrumpieron la visita, aunque pienso que que lo resolvimos bien con una tertulia improvisada en la biblioteca. Por cierto que al día siguiente la directora de la biblioteca, Mª José Ariza me pidió disculpas.
Espero que también os haya resultado de interés la visita y que los que pudisteis asistir compartáis vuestras experiencias con el resto de compañeros y compañeras, así que os animo a que escribáis cada uno un comentario en esta entrada: ¿Qué os pareció la visita? ¿qué cosas os llamó la atención de cuanto visteis? ¿qué fue lo que más os gustó? ¿qué aprendizaje obtuvisteis de cara a nuestra asignatura, a nuestra profesión, a la cultura en general? La compañera Ana M. Adarve (1º B) se ha comprometido a generar una entrada con las noticias históricas más llamativas sobre el Hospital Real, así que tenemos que ayudarle.
Animaos a escribir.
Prof. Amezcua
Esta mañana, hemos acudido al Hospital Real de Granada, sin duda alguna ha sido una visita muy enriquecedora donde hemos podido observar el majestuoso edificio que alberga el actual rectorado de la universidad de Granada.
Aunque conocía el Hospital Real por fuera, nunca había visto su interior, y puedo decir, que merece la pena. No sólo por sus patios o la celda que recrea la sala donde estuvo recluído S.Juan de Dios; sino también por la increíble biblioteca , una joya que contiene el Codex Granatensis aparte de muchos ejemplares de gran valor…
¡Y cuyo acceso es gratuito!
Naomi Cano Ibáñez. 1ºC.
De la visita al Hospital Real una de las cosas que más me intrigó fue lo que Inés nos contó sobre las rejas que rodean al hospital, que proceden del antiguo hospital de San Lázaro; me atrajo la atención que algo tan aparentemente simple como una verja tenga tanta historia, y haya rodeado un hospital que ya no está en funcionamiento, evitando que los enfermos de peste salieran y contagiaran a la población.
También me llamó la atención la diferencia entre los patios interiores del hospital, sobretodo el patio de los Inocentes, por su austeridad y frialdad. Debió de ser duro tener una enfermedad mental en la época en la que el Hospital estaba en funcionamiento, estar enjaulado, sufriendo abusos y faltas, sin que nadie te escuchase ni tratase de curarte. Juan de Dios vivió una experiencia que me parece admirable y terriblemente dura, y supo sacar lo mejor de ella, dedicando el resto de su vida a los enfermos y débiles que hasta el momento habían sido marginados y olvidados.