Existe poca discusión sobre el hecho de que la aspirina es uno de los medicamentos de uso más extendido en todo el mundo. Una de sus indicaciones más frecuentes y conocidas actualmente es la prevención de las enfermedades vasculares tromboembólicas. No obstante, el papel de este medicamento en la prevención primaria de estas patologías puede haber sido sobrevalorado. Esta es la interpretación de los datos y conclusiones del trabajo del grupo Antithrombotic Trialists’ (ATT) Collaboration publicado la semana pasada en The Lancet, en el que se considera que los beneficios de la administración sistemática de bajas dosis de aspirina en personas sanas no son estadísticamente significativos, mientras que sí lo es el aumento del riesgo de sufrir hemorragias.
Aunque la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de Andalucía, suministradora de la información, en su servicio de Difusión Selectiva de la Información no extrae habitualmente información de revistas médicas de amplia difusión, la importancia del tema tratado por este artículo, la metodología y la amplitud de la muestra hacen que sea éste un caso excepcional.
El artículo Antithrombotic Trialists’ (ATT) Collaboration. Aspirin in the primary and secondary prevention of vascular disease: collaborative meta-analysis of individual participant data from randomised trials. Lancet 2009; 373 (9678): 1849-1860 puede ser consultado en https://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(09)60503-1
[Información suministrada por la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de Andalucía]